¿de verdad quiero tirar contigo?

la tienes súper grande y hace tiempo no me follan. ¿va a costar que entre? sí. ¿me va a doler? sí. ¿va a ser frustrante? sí. ¿existe la probabilidad de que te quedes con las ganas? sí. ¿vale la pena? no sé.

te escribo sin saber por qué. porque no me interesas. somos distintos, pero no radica allí el dilema, sino en que eres mucho mayor que yo, supongo estás resuelto y que supongo tampoco hay razones para que te interese más allá de tirar y ya.

le tengo que mentir a mi mamá. voy a tener que salir tarde de mi casa con lo -igual- peligroso que es. y tendré que dormir contigo con la alta posibilidad de que no me caigas bien. o quizá si me caigas bien, pero no voy a poder satisfacer tu deseo de metérmela entonces será frustrante.

creo que me debería estar metiendo dedos en este momento.

y pensar en la excusa que le daré a mi mamá para ir donde la Mille igual que hace dos días, pero dos horas más tarde.

por la chucha.

es viernes otra vez. el cielo está parcialmente nublado. Katy Perry sacó un tema nuevo. y hoy termina la semana más intensa del verano.

no reflexión

En esta noche de febrero quiero hablar de una cosa en particular, a pesar de los acontecimientos que remecieron el hoy: Beyoncé anunció que tendrá gemelos y, como no me morí el año pasado durante la operación, no me reencarnaré en ninguno de ellos. Además, hasta ahora, la cita con chelas se ve en el horizonte como algo que sí pasará. También, aprovecho de contar que escuché Emotion y, mientras escribo esto, escucho EMOTION SIDE B, obvio de la pulenta Carly Rae Jepsen -la de Call Me Maybe-.

Como sea, de lo que quiero contarles es sobre una reflexión que comenzó anoche hablando con mi mamá.

Debes tratar mejor a tu hermano. 

Yo con mi hermano somos distintos. Muy distintos. Y mi mamá le echa la culpa a la genética:

- Tú sabís como son los genes de tu hermano. Tu cachai que todos sus primos están en pastillados con déficit atencional, repitiendo y tú cachai.
- Ya, si sé. Pero puta.
- Ya po, entonces... Hay que ayudarlo. Si se nota que a él le cuesta.
- Ya, si sé. Pero a veces te juro que me molesta que no piense por él mismo.
- Pero es que tu hermano es como yo.

Mi hermano no es proactivo. Mi hermano no lee. Mi hermano nunca sabe nada y no le interesa saber. Siempre me pide que le solucione los problemas sin intentar resolverlos por sí mismo. Y obvio que me molesta un poco. Yo cuando era chico estaba solo. Jugaba con mi reflejo y aprendí todo por ensayo y error. Sí, somos generaciones distintas. El mundo es muy distinto al que yo crecí. Pero weon, no es excusa creo yo.

Mi mamá me recuerda que yo y mi hermano somos distintos. Tenemos padres distintos. Y eso hace mucho la diferencia. La familia de mi hermano es más disfuncional que la chucha. Todos sus primos están con pastillas, tratamientos y han repetido uno o más años. Ninguno tiene más de 16 años, y el único que es mayor de edad es papá.

Mi hermano es muy emocional. Quiere ser futbolista cuando grande. Y siempre busca referentes a quienes seguir.

Mi relación con mi hermano es difícil de explicar. Soy duro con él. Sí. Pero tampoco soy capaz de explicar bien por qué. Somos distintos. Pero algo que siento y sé, es que mi hermano será mejor persona de lo que yo fui.