lo más coherente

segunda mitad del segundo (cuarto) semestre.

entonces... la semana anterior a mi cumpleaños, el fin de semana para ser más específico, me fui a Valparaíso, a los mil tambores para ...

viernes pa (estudiar) procastinar.

Nunca me pongo estas zapatillas.
En serio, nunca; y me las puse porque me dije
"mismo, ¿y si te dai color?" 
Eran como las una y pico cuando me las puse. Tenía ayudantía a las dos. Me quedé diez minutos más sentado en la cama decidiendo si valía la pena ir (llegar) a clases tarde o no, y como pasadito las una y media me dije "mismo, ni cagando, qué paja el pique, más encima llegar atrasado... igual como que podriai estudiar". 

Eran casi las dos cuando bajé a calentarme almuerzo. Le apliqué a su bandeja, y subiendo encontré súper buena idea relajarme viendo algo en Netflix, porque qué fome comer estudiando. Prendí la Play, y tomé la foto. 

-Ni cagando la subo a instagram. Qué poco aesthetic. 
-Pero igual está buena.
-Mh, sí. Podría escribir algo en el blog. 
-Ya, pero anótalo porque siempre se te olvida lo que vai a escribir.



Acabo de tomar el pantallazo y, de verdad, había olvidado el punteo/fin/orden del post.


Tengo las zapatillas desde, puta, muchos años, y el recuerdo que siempre vuelve cuando las miro es de mi primera curadera/carrete therial, con una imagen mental de los pies de Prometida* (usando las mismas zapatillas, pero más carreteadas).


En fin, no recuerdo cómo iba a contar la anécdota, si la iba a volver chistosa, dramática, triste o melancólica, pero mencioné a mi Prometida de la vida, y a ella le tengo mucho cariño, así que la contaré lo más chistosa posible:

Érase una tarde de septiembre, el cumpleaños de la Führer. Me invitaron a mi primera junta piola de la vida. Iba a haber copete (yo nunca había tomado), y no conocía a nadie salvo el muchacho que me invitó (primer chico que me atrajo sin culpas/primer beso fleto). Pa'cerla corta: todos hechos pico, comiéndose en cualquier lado, haciendo tríos, cuartetos y quintetos de besos, y mi Prometida yacía en coma etílico en el piso. 

Ah, (aclaración)*: en ese primer carrete de la vida, y como era vez primera que la veía, me pidió matrimonio y, obvio, le dije que sí. 

Filo, me fui de ese carrete con fama de suelto/pelado y ya no tan interesado en el muchacho, sino en Guachita**, su mejor amiga. Fin.

-¿Qué sigue? -Netflix. -Ah, ya. Sí. 

Sí me gusta ver películas, pero lo que más he visto últimamente son documentales, principalmente sobre lo mierda/cagado que es/está el mundo/sociedad capitalista/patriarcal de hoy. ¿Por qué? Porque igual me interesan, y porque duran menos que una película. La wea es que siempre que quiero ver una película no me puedo decidir por cuál ver, entonces me da ansiedad, porque cacho muchas películas buenas que ver, pero duran dos/tres horas, y no tengo tanto tiempo; o dura poco, pero es como para verla con amigos, entonces la guardo en mi lista, y no veo nada y me da ansiedad, y como me da ansiedad termino poniendo cualquier weá. 

El viernes, por ejemplo, (día de la foto) puse una película en la que sale el loco de La Red Social y el guachito más mino de la vida actual: Dave Franco. Puta que es mino Dave Franco, muy enamorado de él. Filo, la película era buena igual y, pucha, me dio paja estudiar entonces puse un documental sobre la DMT (la droga máxima de la vida, onda muy brigida, pero que te dura con cuea quince minutos). La wea, es que el documental era muy volá/drogas/psicodelia/chanta/bajo presupuesto y me empecé a ir en pálida, así que apagué todo y me fui a tomar una siesta. 

Cuento corto, desperté súper tarde, no estudié niuna weá, y me puse a ver (solo, comiendo una alcachofa) una de las películas chistosas que había guardado para ver con alguien: Bad Neighbours. Güena, güena la película, Y ADIVINEN QUIÉN SALE. Guachito de Dave Franco<3, ¡y hasta sale tirando! (muestran el poto y el movimiento pélvico del chiquillo: cosa ma'güena). 

En fin, después de la película vi dos/tres capítulos sueltos de American Horror Story y me fui a acostar (Dos de Freak Show y el último de Coven -en ese orden-).

Voy a dejar el post hasta acá porque tengo sueño, y porque el resto del punteo se explica solo. Bai.
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*  : No se me ocurrió otro apodo porque, puta, falta de imaginación, y me dio cosa usar tu nombre real. tkm.
**: Nombre inspirado/sacado del blogger de Prometida. 

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