moral

​hoy puede ser uno de esos días donde las cosas pasan y tú sólo sonríes porque eso es lo que te enseñaron cuando chico.

o puede ser uno de esos días en que algo muy intenso (o brigido) pasa, y te sorprende la calma con que lo manejas.

hoy una inocente historia de amor se convirtió en un episodio de skins donde todo está muy fucked up, pero aún así los personajes actúan airosos con fe en que todo va a estar bien (o aparentan tenerla).

una seguidilla de emociones, una tras otra, a velocidad que sólo la sangre es capaz de correr.

todo lo demás estático, surrealista, ajeno.

pero no es un sueño, tampoco una broma, está pasando y el aire surge efecto.

la calma, lo open mind, el entender y no querer juzgar ganaron el juego contra la desesperación, la realidad de golpe y los trozos de una idealización rota.

nunca había visto las marcas de la heroína, ni me habían ofrecido tan efusivamente probarla:

"A ver tus venas".


"mh, no está en mis planes inyectarme"



sólo fue eso. una idealización que tampoco debía tener lugar.
¿entonces? nada, ojalá vernos pronto.
sé que por ambos todo seguirá igual:

esporádico, efímero, pero intenso. 

y lo aprecio, de verdad que sí